El equipo científico de la Fundación CIEN ha confirmado en un nuevo estudio la conexión entre los niveles en sangre de la proteína fibrilar glial ácida (GFAP, por sus siglas en inglés) y el desarrollo de la enfermedad de Alzhéimer. Esta investigación, que se ha publicado en la revista Brain, establece por primera vez en humanos la relación entre esta proteína y la activación de los astrocitos en el cerebro, clave en los procesos inflamatorios asociados al desarrollo del alzhéimer. Junto a los depósitos de proteínas tau y amiloide, la activación de los astrocitos es uno de los tres procesos clave en el desarrollo de la enfermedad.
La investigación se basa en el diseño único del Centro Alzheimer Fundación Reina Sofía, en el que CIEN ha recopilado más de 10 años de datos de voluntarios de la residencia del centro, según explican en una nota informativa que puede leerse íntegramente aquí.